Prehistoria, cuentos y leyendas de los megalitos

Monumentos de granito que se remontan a tiempos inmemoriales, los megalitos son emblemáticos de Bretaña. Teñidas de cuentos y leyendas, estas reliquias que se descubren en el corazón de un bosque o en el recodo de un sendero forman parte integrante del folclore bretón y del destino Saint-Malo Baie du Mont-Saint-Michel.

Su cuota de misterio, el origen mismo de su existencia fascinan.

Los megalitos proceden de una herencia anterior al carácter celta de Bretaña y, sin embargo, de generación en generación continúa la transmisión de historias en las que se mezclan una parte de realidad y una pizca de imaginario.

Los megalitos son un símbolo de la historia de Bretaña.

se inaugura un Monumento Histórico La casa de las hadas en el bosque de Mesnil, en Mesnil Roc'h

Testigo excepcional de la prehistoria, la pasarela cubierta impresiona por sus dimensiones, 14 metros de largo y 41 piedras que pesan entre 5 y 40 toneladas

Dos de estas piedras llevan cada una cuatro medias esferas de bajorrelieve. Muestran los símbolos de divinidades femeninas que atestiguan la introducción del culto a la «Gran Diosa» en la región durante el tercer milenio antes de Cristo. Muchas leyendas sobre «caballitos del diablo voladores» tienen su origen aquí, y los numerosos paseos y senderos interpretativos a veces te llevan a un árbol en el que podrías encontrarte con uno…

Los Menhires el Champ Dolent, la Pierre longue y los megalitos de Roche-Buquey

En Dol-de-Bretagne, el menhir du Champ Dolent, es uno de los más altos de Bretaña con 13 metros de altura.

Aún hoy se cuenta aquí una leyenda que alude a la batalla que tuvo lugar en Bretaña en el año 560 d.C. entre Clotaire I, rey de los francos y su hijo Chramme. Descubra todas las leyendas del Menhir du Champ Dolent, aquí.

El Menhir de la Pierre Longue en Cuguen es reconocible por la cruz que lo corona, un intento de cristianizar este lugar pagano.

En Pleine-Fougères, el megalito de Roche-Buquey atestigua que el lugar está habitado desde hace 5.000 años. Hay un dicho popular que afirma que «cuando Roche-Buquey «caiga, llegará el fin del mundo»…

El yacimiento neolítico de Lillemer

El pueblo de Lillemer está situado entre el Pantano Blanco y el Pantano Negro, al oeste de Mont-Dol. Durante las excavaciones arqueológicas llevadas a cabo desde 2001, se han descubierto restos del Neolítico que datan del 4.000 a.C.

Gracias a la humedad del suelo de turba, los restos descubiertos se encuentran en un estado de conservación excepcional. Entre los descubrimientos figura una entrada monumental, que presume la existencia de un sistema de recinto neolítico escalonado sobre el montículo de Lillemer. Se han desenterrado miles de objetos líticos, cerámicos y domésticos, así como huesos de un enterramiento adulto.

Las excavaciones realizadas en el poblado han dado lugar a un Espacio de Interpretación Arqueológica de Lillemer. El espacio está abierto a los visitantes de forma gratuita, en el mismo horario que el ayuntamiento.

Parque arqueológico de Lillemer.

©Espace d'interprétation archéologique de Lillemer|©StephaneMaillard

Tesoros arqueológicos

En Mont-Dol ¡los primeros habitantes fueron los mamuts!

Mamuts en la cima

Hace 110.000 años, los cazadores neandertales eligieron este lugar para construir sus refugios y cazar.
Los primeros indicios de ocupación humana y uno de los mayores yacimientos paleolíticos de Francia fueron descubiertos en 1873 cuando los canteros explotaban el granito. La envergadura del yacimiento era excepcional: restos de unos cincuenta mamuts, doce rinocerontes lanudos, unos cincuenta caballos, ocho grandes ciervos megaceros, diez renos, cuatro lobos, un oso, un león, así como sílex, puntas musterienses, raspadores, etc…

Paleolítico.