

Un rápido vistazo a la página web de la Oficina de Turismo, descubra la página «Saludadores», concierte una cita orquestada por Victoria o Edouard y ¡listo! el encuentro con Serge está concertado para un paseo 100% local con un tipo local.¡
¡Hoy hemos elegido a Serge, pero cada greeter tiene su propia especialidad, así que hay un montón de posibilidades para un paseo (sabores locales, las villas del Sillon, la Cité d’Alet…)!
¿Te suena el término «Greeter»?Serge tampoco! Un término 100% anglófono para conocer 100% gente bretona, ¡qué idea! Así que podemos decir que conocer a un local, no es muy halagador; conocer a un embajador, ¡oh qué prestigio! Un simple paseo, con una persona apasionada, eso es lo que nos ofrecen los greeters!
Aquí se concierta la cita y quedamos delante de la Oficina de Turismo de Saint-Malo para dar un paseo por las calles de Intra-Muros con Serge.
Nos presentamos por turnos, y empezamos con buen pie, ya que el humor está presente.No estamos en grupo, estamos con amigos, familia… Estos paseos están limitados a 6 participantes.
Paseo por las calles de Intra-Muros con Serge.
Primera parada, el castillo de Saint-Malo, donde las andanzas e investigaciones de Serge le han llevado a descubrir una serie de pequeñas curiosidades.
Es fascinante porque se nota enseguida que Serge ama su ciudad y tiene un gran interés por su historia. Aprendemos mucho sobre la ciudad, pero también nos reímos con las anécdotas y las historias. ¿Sabías que había una fuente de agua en el patio del castillo? Pues yo no, ¡aunque conozco la historia de Saint-Malo!
Serge nos enseña su carpeta con reproducciones, mapas… Toda su investigación sobre la ciudad. Como él dice, nos enseña sus fotos porque somos «tan sabios como las fotos».
Delante del bar Univers, nos enteramos de que Serge es nieto de Cap-Hornier. Que este bar sirviera de cuartel general de los marineros, enseguida nos imaginamos a su abuelo contando sus historias en el mostrador como hace ahora Serge. ¡La herencia está ahí!
Continuamos nuestro paseo por las calles de Intra-Muros para encontrarnos con las casas… Nos tomamos el tiempo para entrar en el patio de la Houssaye donde la duquesa Ana no se habría alojado después de todo. Luego nos detenemos ante un mascarón de proa y Serge nos cuenta que antiguamente los marineros tenían que pelearse por el derecho a limpiar a la dama. Imaginamos a los pobres marineros en alta mar durante meses (si no años), con una tripulación compuesta exclusivamente por hombres, luchando por el derecho de acceso a la única imagen femenina del barco. Y entonces, una risita compartida, la imaginación de todos y especialmente la de Edouard el único hombre que participa en este paseo, ¡que entiende perfectamente cómo se sienten los marineros!
Estamos cerca de nuestro «lugareño». No vemos pasar el tiempo… Caminamos durante casi 2 horas. Porque con tan contagioso buen humor, supo transmitirnos su pasión por su ciudad de Saint-Malo. Nos llevó a un paseo narrativo, contado con sus palabras y sus sentimientos.
¡Todos guardamos un gran recuerdo de este momento compartido con Serge! De las pequeñas anécdotas que nos contó y, sobre todo, de su humor con los pies en la tierra.
Nos quedamos con un gran recuerdo de este momento compartido con Serge.
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